Te me perdiste en el tiempo, olvidé los días, las fechas, lo
importante y lo vano, las horas no existían y el sueño era uno solo, continuo y
largo, pero cada mañana que estos ojos se abrían era una bendición y en las noches sin poder dormir con la cabeza llena de revoloteantes pensamientos seguía
siendo un momento de fe, esa que no se perdía por más oscuro que terminara el
día.
Se me olvidaban las cosas, desde una ducha hasta comer se me
hacía injusto, caminar y ver la luz se volvieron egoístas porque si tú no
podías verla yo tampoco quería. La delicadeza se volvió tanta que hasta
escuchar tu nombre me dolía… Y a veces sonreía, no te creas, recordando tu
energía, y me encontré hablando en pasado porque en el fondo sabía que te irías.
De igual manera preparada nunca estuve, jamás se está
preparado para esto, es como un vacío desgarrando tu alma, un mar de lágrimas que no te traerían, el milagro que
nunca llegaría.
Ella vino a buscarte y no solo se llevó tu cuerpo, también
se llevó una parte de nosotros, pero salió perdiendo, porque con éste tesoro
que dejaste todos ganamos.
Tú tan político y tan risueño, tú tan fuerte y tan loco, te
leo en voz alta para que me escuches allá arriba, porque esa Luna que me
persigue son tus ojos que me miran. Agazapados, llenos de tus múltiples lecciones,
de tus ganas de vivir, de esos días donde lo aceptamos y esos otros en donde
aún lloramos. Ése espíritu libre y ese valor a lo invisible, lo esencial. Esos
abrazos tan llenos y esa felicidad chispeante, esa música a todo volumen y
aquella voz vibrante, esa piel color chocolate y ese carisma inigualable.
Se quedó tú rayo conmigo, porque por más difícil que sea vivir vale la pena. Porque me sobra el orgullo de haberte conocido, porque me
faltaran palabras para hablar de ti pero me sobran las ganas.
Porque allá no estarás solo, seguro haces una fiesta cada
día.
Te leo en voz alta para que me escuches, porque esa Luna que
me persigue son tus ojos que me miran.
Nota: Posible prólogo. En la memoria de mi amigo de la infancia, sus ojos se cerraron el 4 de Enero del 2013. Uno de los mejores seres humanos que he conocido en lo que llevo de vida...
Nota: Posible prólogo. En la memoria de mi amigo de la infancia, sus ojos se cerraron el 4 de Enero del 2013. Uno de los mejores seres humanos que he conocido en lo que llevo de vida...