miércoles, 11 de abril de 2012

Tómalo todo.


Yo estaba ahí rodeada de varios desconocidos, camino a un nuevo lugar, sentía un frío escandaloso que me llegaba hasta lo mas profundo de mis huesos, quizás este frío no era tan grande como para sentirlo de tal magnitud, pero, para mi si lo era y no obstante estaba ardiendo en fiebre, y tan solo, había tomado un leve antigripal muchas horas antes de que mi temperatura se elevara tanto…

Recuerdo perfectamente aquellos ojos que me miraban preocupados, aquellas manos que se frotaban junto a las mías para lograr calmarme un poco, las suaves sabanas que me arropaban y que parecían ser en vanas ya que no lograban algún cambio, las largas horas y tu cálida compañía, aquellos paisajes tan naturales que pude ver deslumbrada y ansiosa. Así poco a poco me fui quedando dormida entre luces nocturnas que pasaban por la ventana y se reflejaban en mi cara. Luego al despertar tú seguías ahí a mi lado, hablando un poco se fue pasando el tiempo hasta que por fin llegamos a nuestro destino y yo tan solo al quitar mi blusa caí muerta en un profundo sueño, fogaje y calor, el cual termino de pasar al otro día. 

¡Buenos días!  … Escuché aún medio dormida, percibí aquel olor de tu piel que tanto soñé y entonces comprendí que habíamos emprendido aquella hermosa y  agridulce aventura.
Comenzaron a correr aquellos tan esperados días, entre tomar tu mano y caminar ratos largos, variados autobuses y otras clases de autos que en mi pueblo no suelen usarse con tanta frecuencia, sonrisas, comida, nuevos lugares, pero sobre todo esa nueva sensación, algo que no había vuelto a sentir en mucho tiempo, algo aquí en el estomago pegado, extraño, diferente, algo que me hacia pensar que estaba en un profundo sueño del cual no quería despertar, con unas inmensas ganas de no apartarme de aquel lugar nunca más, de no soltarte.
Entre pequeños respiros y suaves besos me hacías sonreír sin parar, luego la pasión nos atrapaba con fuertes caricias y así la ropa iba cayendo al suelo, a la cama, a cualquier lado menos en nuestros cuerpos, pues, mi cuerpo solo estaba en el tuyo y así se convertía en la manera más pura de hacerme el amor.

Nuestra conexión era la más volátil que había podido experimentar, era un lazo profundo de sentimientos encontrados, era la mágica música que nos hacia volar al más allá, era la lluvia que cae desesperada de las nubes al no resistir más… 
El olor a naturaleza, la poesía, los libros, las películas, los animales, el arte, todo lo bueno nos invadía por cualquier lado… Tu me has hecho sentir estar en un cuento de hadas, en el cual jamás imaginé estar, pues, cuando la vida real te atrapa pierdes absolutamente toda esperanza de la magia, eso era lo que tu me hacías sentir, la mas simple magia, el mas hermoso cosquilleo, podías sacarla de cualquier lado, como que siempre hubiera estado ahí solo que no podíamos verla…

Entre una limpieza profunda de la habitación podíamos escuchar las hermosas melodías, y bailar al son de la misma, un poco de polvo, estornudos, sudor, besos muy húmedos, risas y tu tomando mi cintura… Cocinar y volver a caer un poco en la monotonía de aquellos días…
Cuando se habla de monotonía se huye, las personas solemos huirle a eso, pero en este caso no, el espectáculo de aquel amor sin medida hace que la monotonía cobre inmenso valor, aquellas palabras que han sido olvidadas, como un “buenos días, te amo, buenas noches, todo estará bien” volvían a tomar forma de alguna manera…
“Seríamos unos tontos si dejamos perder esto”…Te dije.
Solemos ser tan incrédulos que creemos que este tipo de encuentros es fantasía y tan solo pasa en el cine, pues no es así, en cualquier lugar del mundo por mas cerca o lejos que esté, sea a la edad que sea, llegue en el mejor o peor momento, todo esto puede ser mas que posible, puede ser tan táctil como el nacimiento de un niño luego de parecer imposible y estar encerrado en un vientre por nueve o quizás siete meses. La verdadera cuestión es saber manejar las cosas, pues, se siente tan inmenso y fuerte que no podemos controlarlo, llegamos a sentirnos estúpidos por no saber como manejar las  actitudes…

Al pasar algunos días, ahora tan solo recuerdo aquel momento como un terremoto, una explosión, una dinamita, ¿cómo es que leer cinco tontas palabras pueden hacerte cambiar en un instante absolutamente todo?

¿Cómo es que ahora puedo sentirme de esta forma? 

Vives en mi mente, todos los días, en mi tiempo, yo pienso en tu cara…. Y quizás nadie lo creería, siento tanto miedo de estos sentimientos, tu necesitas que yo no te necesite, simplemente eras mio…  No puedo entender lo que jamás he conocido.

El tiempo pasa y tan solo quedan dudas, miles de demonios de aquel día, aquel día en donde todo cambio, días que trajeron consigo una cantidad infinita de desilusiones, peleas, poca confianza y un poco de rabia… Mis sentimientos cambiaron tanto en ese momento, que solo quería aventarme de un precipicio.

Besaste mis labios mientras algunas lagrimas caían, oh mi querido amor.
Es tan ilógico que tanta perfección haya cambiado en tan pocos segundos… Dime tú por favor.
Quizás hoy ya te encuentres con alguien más, se que la vida te va a dar siempre lo mejor, mira dentro de tu mente, el tiempo no pasa en vano. Me enseñaste que el verdadero amor existe y arriesga.

Aunque siga sintiendo dudas y extraños miedos… Primero y único.
Aún puedo sentir tu corazón. Nadie es perfecto, lo aprendí. 

Ven y tómalo todo… No mires atrás, a esta idiota que se derrumba, tómalo todo con mi amor.
Tal vez debería irme y así ayudarte a ver que nada es mejor que esto…  

Cambiaré y me adaptaré, si tan solo supieras….

“Seríamos unos tontos si dejamos perder esto”… Te dije. Lo fuimos...

Ven y tómalo todo con mi amor.


NOTA: posible prólogo para uno de mis libros.